El candidato de Fuerza Patria criticó con dureza la reforma laboral y tributaria anunciada por el Gobierno, denunciando la falta de diálogo con sindicatos, pymes y trabajadores, y advirtiendo que el proyecto profundiza la precarización y recorta derechos.
En un contexto de creciente tensión social, Jorge Taiana se pronunció contra la reforma impulsada por Javier Milei, señalando que no responde a los desafíos del siglo XXI, sino que busca retroceder en derechos conquistados. El ex canciller sostuvo que la modernización debe basarse en el consenso, la inclusión y el respeto a la dignidad laboral.
El candidato de Fuerza Patria, Jorge Taiana, expresó su rechazo al anuncio del Gobierno de Javier Milei de avanzar con una reforma laboral y tributaria sin abrir canales de diálogo con los sectores involucrados. Según Taiana, el Ejecutivo actúa con una lógica autoritaria que excluye deliberadamente a los trabajadores, sindicatos y pymes, sectores que serán directamente afectados por las medidas.
“El Gobierno anunció una reforma laboral y tributaria sin abrir instancias de diálogo ni de construcción colectiva con los sectores que se verán directamente afectados”, escribió Taiana en su cuenta de X, y agregó que se trata de “una iniciativa que, en lugar de adecuar las leyes a los nuevos desafíos del mundo del trabajo, avanza en la quita de derechos conquistados, debilitando las condiciones laborales y profundizando la precarización”.
El dirigente peronista señaló que la Argentina sí necesita una reforma laboral, pero no una orientada a destruir conquistas históricas sino a ampliar derechos y adaptarse a las nuevas formas de empleo. “Debe contemplar el trabajo digital, las economías del cuidado y los desafíos de la automatización”, precisó, al tiempo que defendió la necesidad de promover “empleo digno, con protección social, estabilidad y salarios justos”.
Taiana también destacó el encuentro que mantuvo en Mar del Plata con los candidatos y candidatas de Fuerza Patria, donde escucharon a trabajadores de distintos sectores productivos. Desde allí, remarcó que el país no puede avanzar sobre la base del ajuste y la desprotección, y cuestionó duramente la orientación neoliberal del plan oficial: “La verdadera modernización no consiste en flexibilizar al trabajador, sino en construir un marco laboral más justo, inclusivo y solidario”.
En su mensaje, el ex canciller insistió en que ninguna transformación estructural será legítima ni sostenible si no surge del consenso social. Por el contrario, advirtió que las políticas unilaterales del Gobierno solo profundizarán la desigualdad y la concentración económica. “Solo una reforma progresiva, fruto del consenso social, podrá fortalecer el empleo y garantizar un futuro con dignidad para todos y todas”, concluyó.
Las declaraciones de Taiana se enmarcan en un escenario de fuerte resistencia sindical y empresarial frente a la reforma impulsada por Milei, que pretende reducir las indemnizaciones, ampliar los períodos de prueba y flexibilizar las condiciones de contratación, bajo el argumento de “modernizar el mercado laboral”. Sin embargo, para amplios sectores del mundo del trabajo, lo que se esconde detrás de ese discurso es un retroceso de décadas en materia de derechos y protección social.
El planteo de Taiana interpela directamente al núcleo del debate político actual: ¿qué tipo de país quiere construir la Argentina? Uno que profundice el ajuste y la desprotección, o uno que apueste por un modelo inclusivo, con trabajo digno y derechos garantizados. Frente a un Gobierno que concibe la competitividad como sinónimo de precarización, su propuesta apunta a rescatar el sentido histórico del peronismo: que el trabajo no sea una variable de ajuste, sino el motor del desarrollo nacional.
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