Denuncian que Lácteos Vidal aportó a la campaña de Bullrich con dinero de Fred Machado

Compartí esta nota en tus redes

El senador Mariano Recalde lanzó una acusación que sacude a la política argentina: aseguró que Patricia Bullrich también fue financiada por el narcotráfico. Según el legislador, la ex candidata presidencial recibió aportes de Alejandra Bada Vázquez, dueña de Lácteos Vidal, empresa que a su vez habría sido financiada con dinero del empresario detenido por narcotráfico Federico “Fred” Machado.

La trama involucra una avioneta siniestrada en Entre Ríos con medio tonelada de cocaína y deja en evidencia los vínculos entre negocios, política y lavado de dinero.

“Recibió aportes de Alejandra Bada Vázquez, dueña de Lácteos Vidal, quien a su vez recibió muchísimo dinero de Fred Machado”, afirmó Recalde, al detallar cómo —según documentos judiciales— se habrían triangulado fondos entre empresas y campañas políticas. La historia detrás de esas palabras es tan oscura como compleja: Fred Machado, empresario argentino detenido en Estados Unidos por narcotráfico y lavado de activos, figura como financista de una red de sociedades utilizadas para mover dinero entre Argentina, Uruguay y paraísos fiscales. Entre las firmas señaladas aparece Lácteos Vidal, actualmente en conflicto con el gremio Atilra por incumplimientos laborales y vaciamiento empresario.

El sindicato ya había denunciado públicamente la relación entre Bada Vázquez y Machado, aportando documentación que muestra transferencias millonarias desde cuentas vinculadas al empresario hacia la empresa láctea. Según esas denuncias, parte de ese dinero habría terminado en los aportes declarados por Bullrich en su campaña presidencial de 2023.

La trama adquiere un tono cinematográfico con el episodio de la avioneta estrellada en Entre Ríos, donde se hallaron alrededor de 500 kilos de cocaína. Las investigaciones apuntan a una empresa de transporte relacionada con el mismo circuito financiero que unía a Lácteos Vidal y a Fred Machado. El avión, valuado en una cifra muy inferior al mercado, habría sido adquirido por una sociedad vinculada a los mismos dueños que operaban con fondos del narcotráfico. Esa aeronave —según fuentes judiciales— era utilizada para mover cargamentos entre el litoral argentino y Brasil, y figura como una de las pruebas más fuertes en la causa internacional contra Machado.

Desde el entorno de Patricia Bullrich no hubo respuesta oficial ante la acusación de Recalde. La ex ministra de Seguridad, que construyó su perfil político como “dura” contra el narcotráfico, enfrenta ahora un señalamiento que pone en jaque su discurso: la posibilidad de que su propia campaña haya sido financiada con dinero del mismo circuito narco que dice combatir. Por su parte, Alejandra Bada Vázquez negó toda relación con Machado y aseguró que su empresa “nunca hizo aportes a la campaña de Bullrich ni de ningún otro candidato”. Sin embargo, los documentos presentados por Atilra en la justicia revelan movimientos bancarios que coinciden con las fechas y montos denunciados.

La denuncia de Recalde reaviva un debate incómodo: la falta de transparencia en el financiamiento de la política y la permeabilidad del sistema a los capitales del narcotráfico. Mientras la justicia aún no se pronuncia sobre el caso, los vínculos entre empresarios, campañas y estructuras de lavado siguen saliendo a la luz. La combinación entre poder económico, complicidad política y silencio mediático parece formar el verdadero mapa del dinero sucio en la Argentina. Lo que hasta ayer era apenas una sospecha sindical hoy se transforma en un escándalo con potencial impacto político. Si se confirma la ruta del dinero narco hacia la campaña de Bullrich, el caso podría convertirse en una de las investigaciones más graves sobre financiamiento ilegal en la historia reciente del país.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *