El Grupo Simpa clausuró su fábrica de motos KTM en Campana y trasladó la producción a Pilar. La UOM denunció el cierre como “bochornoso” y reclamó respuestas, mientras el gobierno de Javier Milei sigue sin dar señales de un plan para sostener el empleo industrial.
La reestructuración empresarial dejó a 50 operarios sin trabajo y encendió las alarmas sobre el retroceso del empleo manufacturero en Argentina. El episodio se enmarca en un contexto de caída del empleo privado y revela la falta de políticas públicas para proteger a los trabajadores frente a las decisiones de las multinacionales.
El cierre de la planta de ensamblaje de motos KTM del Grupo Simpa en Campana volvió a poner en evidencia el deterioro del empleo industrial en la Argentina. Cincuenta trabajadores fueron despedidos de manera intempestiva, sin aviso previo, y con la amarga confirmación de que la producción se concentrará exclusivamente en la planta de Pilar. La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) calificó el hecho de “bochornoso” y denunció que detrás de la reestructuración no hay más que un recorte brutal sobre las espaldas de las familias trabajadoras.
El argumento empresarial fue claro: uno de los socios internacionales de Simpa decidió modificar su estrategia global y dejar de fabricar ciertos modelos en Argentina y en otras filiales. Esa decisión se tradujo en el vaciamiento inmediato de la planta de Campana. Para la compañía, concentrar la producción en Pilar asegura “eficiencia, competitividad y atención al cliente”. Para los trabajadores, en cambio, significa perder el sustento y ver cómo se dinamita la estabilidad de una comunidad entera.
La postal fue contundente. Banderas, bombos y cánticos acompañaron las protestas frente a la planta cerrada, con familias enteras reclamando lo que parecía una obviedad: el derecho a seguir trabajando. La UOM insistió en reabrir el diálogo, pero la respuesta empresarial no cambió. En paralelo, el Gobierno nacional brilló por su ausencia, sin mostrar la más mínima intención de intervenir ni de plantear un plan que frene la sangría de empleos industriales.
El caso no es aislado. Según los datos oficiales del Ministerio de Capital Humano, en junio se perdieron 12.000 empleos privados registrados, mientras que el sector público sumó 7.000 nuevos puestos. El contraste refleja el vaciamiento del mercado laboral privado, sobre todo en manufacturas, donde la caída alcanzó el 0,9% interanual. El cierre de Campana, entonces, es apenas un eslabón más de una cadena de retrocesos que se repite en distintos polos fabriles del país.
Lo preocupante es que este proceso no surge de un fenómeno inevitable ni de un accidente coyuntural: responde a una política económica que deja todo en manos del “mercado” y se desentiende de la responsabilidad de sostener el empleo. Bajo el gobierno de Javier Milei, la industria manufacturera aparece como un sector librado a la suerte de las multinacionales y de los costos internos, sin que exista un programa que priorice el trabajo argentino.
Mientras los despidos golpean a las familias de Campana, el Ejecutivo repite su mantra del ajuste y la competitividad, sin contemplar el impacto social de estas medidas. El modelo de Milei, que se jacta de “liberar” la economía, lo que está liberando en realidad es la desprotección de miles de trabajadores. Cada fábrica que cierra no solo destruye empleo directo: arrastra a proveedores, a pymes y a toda la red logística que depende de esa actividad.
En Campana quedaron 50 familias en la calle. En Pilar se centralizó la producción bajo el pretexto de la eficiencia. Y en la Argentina se profundiza una tendencia que amenaza con pulverizar la base industrial del país. El silencio cómplice del gobierno, que elige mirar hacia otro lado mientras las empresas ajustan, confirma lo que muchos sindicatos vienen advirtiendo: con Milei, la industria nacional no tiene futuro y los trabajadores son siempre los que pagan la cuenta.
Fuente:
.https://www.infobae.com/economia/2025/09/12/cerro-sus-puertas-una-reconocida-fabrica-de-motos-en-campana-y-despidio-a-la-mayoria-de-sus-operarios/
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