Por los bajos salarios renunciaron más de 2.200 efectivos de las Fuerzas Armadas

Compartí esta nota en tus redes

La Comisión Bicameral de Seguridad Interior del Congreso investiga el éxodo de efectivos por sueldos bajos y la crítica situación de la obra social IOSFA, mientras el gobierno intenta reformas estructurales.

Las Fuerzas Armadas y de Seguridad Federales enfrentan una crisis interna sin precedentes: en sólo seis meses se registraron más de 2.200 bajas voluntarias. El detonante es doble: salarios insuficientes y una obra social en colapso. El Senado trabaja en una subcomisión específica, mientras el gobierno nacional impulsa reformas por decreto que agudizan el malestar entre el personal.

La política de ajuste también pasa factura dentro de las propias filas del aparato estatal encargado de garantizar la seguridad. Según datos publicados por Misiones Online, durante la primera mitad del 2025 más de 2.200 efectivos de las Fuerzas Armadas y de Seguridad Federales presentaron su baja voluntaria. Los motivos son alarmantes: sueldos depreciados y una cobertura médica que deja desprotegidos a quienes arriesgan su vida en servicio del Estado.

Este éxodo masivo, sin precedentes en los últimos años, encendió las alarmas en el Congreso Nacional. El senador por Misiones, Enrique Martín Goerling, presidente de la Comisión Bicameral de Fiscalización y Seguimiento de los Organismos de Seguridad Interior, reconoció la gravedad de la situación. “Hay muchas quejas, sobre todo vinculadas a la obra social IOSFA, que tiene serios problemas de funcionamiento”, declaró.

La IOSFA (Instituto de Obra Social de las Fuerzas Armadas y de Seguridad), que nuclea a personal activo y retirado del Ejército, la Armada, la Fuerza Aérea, Gendarmería y Prefectura, es apuntada como uno de los focos del malestar. Con más de 600 mil beneficiarios en todo el país, su crisis operativa impacta de lleno en los sectores más vulnerables: quienes viven lejos de los grandes centros urbanos.

Según denuncias internas, hay prestaciones interrumpidas, estudios médicos demorados, y descuentos en farmacias que no se cumplen. Todo por atrasos en los pagos a médicos y prestadores, especialmente fuera de las capitales provinciales. La paradoja es brutal: efectivos que aportan entre 100 mil y 300 mil pesos mensuales a su obra social, no logran acceder a una atención digna cuando la necesitan.

Ante este escenario, el Congreso avanza en la creación de una subcomisión dentro de la Bicameral que investigue tanto los problemas de la IOSFA como los reclamos salariales y laborales. Goerling confirmó que ya se iniciaron auditorías internas en la obra social, aunque también admitió que las dificultades “vienen arrastradas de gestiones anteriores”. Sin embargo, el desfinanciamiento actual se ha profundizado bajo la gestión de Javier Milei, lo que obligó a una intervención para intentar reordenarla.

“El problema se agrava en ciudades como Posadas o más pequeñas, donde la caída de un sanatorio puede significar la interrupción total del servicio”, explicó el senador, quien tiene relación directa con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. La atención médica, en este sentido, muestra un claro patrón de desigualdad geográfica, como ocurre en muchas obras sociales nacionales.

En paralelo, el gobierno impulsa reformas estructurales en las fuerzas mediante decretos, un mecanismo que ya generó tensión en el Congreso. Cambios en la Policía Federal, Gendarmería, Prefectura y la Policía de Seguridad Aeroportuaria están siendo evaluados por la Bicameral. Algunos legisladores cuestionan su legalidad, y el impacto en las condiciones laborales es otra fuente de creciente malestar entre los efectivos.

Goerling aclaró que el Congreso no tiene potestad sobre las decisiones salariales, responsabilidad exclusiva del Poder Ejecutivo, pero sí puede peticionar, recibir denuncias y ejercer control. En esa línea, adelantó la intención de convertir la Bicameral en un “observatorio de las policías provinciales” que canalice conflictos internos y denuncias por abuso, actuando como instancia mediadora antes de que los conflictos escalen.

“Si no hay un espacio institucional para tratar estas cuestiones, el conflicto está asegurado”, advirtió el legislador, dejando entrever la posibilidad de mayores tensiones si no se adoptan medidas urgentes.

La crisis en las fuerzas federales revela otra arista del ajuste estructural del gobierno nacional. Mientras Milei sostiene un discurso de eficiencia y recorte del gasto público, el colapso de servicios esenciales para sus propias fuerzas de seguridad y la pérdida de recursos humanos estratégicos abren interrogantes sobre los costos reales de su modelo.

Fuente:

  • https://misionesonline.net/2025/07/19/fuerzas-armadas-y-de-seguridad-federales/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *