La Libertad Avanza acomoda al hermano del vocero presidencial como candidato en La Plata

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Francisco Adorni, el hermano del vocero presidencial, será candidato: el nuevo apellido fuerte de La Libertad Avanza en La Plata. La candidatura de Francisco Adorni en la capital bonaerense destapa una vez más el entramado familiar, político y de favores que anida en el corazón del mileísmo. Mientras el Gobierno vocifera contra la “casta”, acomoda parientes y consolida su propio clan.

El flamante reemplazo de Gastón Crespo en la lista de diputados bonaerenses por La Libertad Avanza es nada menos que Francisco Adorni, hermano del vocero presidencial. Sin militancia visible, sin trayectoria pública conocida, pero con un apellido bien posicionado, este nuevo aspirante desembarca en el Congreso a la sombra de su hermano. Otra evidencia de que el Gobierno que vino a combatir los privilegios no hace más que replicarlos.

La noticia pasó casi de contrabando por los portales tradicionales, como si no fuera un hecho político relevante. Pero lo es. Francisco Adorni, hermano del vocero presidencial Manuel Adorni, será cabeza de lista por La Libertad Avanza en la Octava Sección Electoral bonaerense. Sí, en La Plata, la capital provincial, donde se juega parte del músculo político de cualquier fuerza que aspire a proyectarse seriamente en Buenos Aires. La elección del hermano del portavoz no es casual ni inocente. Es una jugada calculada, con olor a favoritismo, y que desnuda una contradicción monumental entre el discurso y la práctica del Gobierno de Javier Milei.

Francisco Adorni no es un recién llegado al espacio libertario. Según consignan los medios, se incorporó al equipo del diputado Agustín Romo, pero hasta ahora había mantenido un bajo perfil. Su ascenso a la primera línea de batalla política no se debe a una militancia destacada ni a una trayectoria académica o profesional fuera de lo común. Se debe, en cambio, a su apellido. Y eso, justamente eso, es lo que el mileísmo venía a combatir, ¿no? La casta. Los acomodos. La vieja política. Los parientes con cargo.

La versión oficial dice que Francisco reemplazará a Gastón Crespo, quien encabezaba la lista anterior y fue desplazado por “estrategia electoral”. En otras palabras, Crespo era un “ajeno” a la estructura interna de La Libertad Avanza. Fue prestado por el GEN de Margarita Stolbizer y ahora devuelto sin demasiadas explicaciones. La excusa de la estrategia no disimula lo evidente: en el mileísmo solo sobreviven los leales, los propios, los que pueden levantar el teléfono y hablar con alguien en Casa Rosada. Los que, como Francisco Adorni, tienen el aval genético del poder.

Resulta grotesco que el Gobierno que se vanagloria de luchar contra los privilegios heredados de la política tradicional, de denunciar los supuestos curros de los “ñoquis del Estado” y de perseguir con furia a toda forma de organización social o gremial, no tenga el menor reparo en replicar los vicios del sistema que asegura detestar. Porque esto no es un caso aislado. Es parte de una lógica más amplia: la del nepotismo militante. La de los amigos, los socios, los hermanos, los parientes que colonizan el Estado y la política con la misma impunidad que supuestamente se vino a erradicar.

¿Quién es Francisco Adorni? Más allá de ser “el hermano de Manuel”, la información que circula sobre él es escasa. Se sabe que estudió Ciencia Política en la UCA, que trabajó en la Legislatura bonaerense y que responde políticamente al entorno del diputado Romo, uno de los emergentes del armado libertario en la provincia. Pero no hay ninguna acción destacada, ningún gesto político visible, ningún mérito que justifique con contundencia su salto a la candidatura. Solo el apellido.

En cualquier democracia madura, este tipo de nombramientos genera incomodidad. En la Argentina de Javier Milei, en cambio, parecen ser parte del nuevo código de normalidad. Mientras se recortan presupuestos a las universidades, se cierran áreas clave del Estado y se reprime la protesta social con dureza, los parientes del poder se abren paso entre los escombros del ajuste con una facilidad escalofriante. Porque si algo deja en claro la postulación de Francisco Adorni es que el mileísmo no solo no está desmantelando la casta: la está reconstruyendo con sus propios nombres y apellidos.

El caso Adorni es también una advertencia para quienes aún creen en el relato de “los mejores”. Ese eslogan con el que el Gobierno pretende justificar cada designación, cada medida, cada atropello. Francisco no es el mejor, ni el más preparado, ni el más experimentado. Es el hermano. Y eso alcanza. Como alcanzó en su momento para Karina Milei, hoy secretaria general de la Presidencia, o para los hijos de otros funcionarios que ya empiezan a ocupar cargos públicos sin pasar por ningún filtro.

La decisión de ponerlo al frente de la lista en La Plata no solo muestra la endogamia del poder libertario, sino también su desprecio por el electorado. La Octava Sección Electoral no es un distrito menor. Requiere presencia, propuesta, músculo territorial. Francisco Adorni no tiene nada de eso. Lo que tiene es acceso. Un acceso directo al centro de decisiones políticas más importante del país. Y con eso basta. Porque en la lógica del mileísmo, la política no se construye desde abajo, con representación genuina. Se impone desde arriba, con nombres bendecidos por la élite libertaria.

El desembarco del hermano del vocero presidencial en la arena electoral no es un episodio menor. Es un síntoma. Un síntoma de un modelo que prometió cortar con los vicios de la vieja política y terminó reproduciendo lo peor de ella. La diferencia, claro, es que ahora lo hace con una sonrisa libertaria y una motosierra en la mano. Y si alguien se atreve a señalarlo, se convierte automáticamente en parte del “colectivismo parasitario”.

La candidatura de Francisco Adorni no solo representa un caso más de nepotismo descarado, sino que constituye una afrenta directa al votante que creyó en el discurso de “la nueva política”. En nombre de esa retórica de ruptura, el Gobierno se permite todos los abusos del viejo régimen. Pero en vez de barones del conurbano, ahora tenemos hermanos de voceros. Y en lugar de punteros, influencers. Eso sí, siempre dentro del círculo cerrado del mileísmo, donde la lealtad familiar y la obediencia ciega pesan mucho más que la vocación democrática o la preparación técnica.

Este es el nuevo orden que propone La Libertad Avanza. Uno en el que los vínculos personales valen más que los méritos, donde los apellidos reemplazan a los proyectos y donde el poder se hereda como si fuera una estancia. El nombramiento de Francisco Adorni como candidato es solo la punta del iceberg. Pero debajo de esa superficie, lo que se vislumbra es un sistema en el que el apellido correcto puede más que cualquier credencial. Y en esa lógica, el futuro no parece muy distinto al pasado que tanto dicen querer destruir.

Fuente:
https://www.infonews.com/hermano-de-manuel-adorni-sera-candidato-a-diputado.html
https://www.infobae.com/politica/2025/07/23/nuevo-cambio-en-las-listas-francisco-adorni-encabezara-la-boleta-de-la-libertad-avanza-en-la-plata/
https://www.lanacion.com.ar/politica/el-hermano-de-manel-adorni-encabezara-la-boleta-de-la-libertad-avanza-en-la-plata-nid23072025/
https://www.latecla.info/160347-cambio-en-la-lista-de-la-libertad-avanza-francisco-adorni-sera-cabeza-de-lista-en-la-octava

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