Ricardo López Murphy, el diputado que se presenta como símbolo del ajuste y la austeridad fiscal, aparece una vez más atrapado en la contradicción de su propio discurso. En las últimas horas se conoció que durante la dictadura militar recibió una licencia con goce de sueldo y viáticos del Estado para cursar estudios en la Universidad de Chicago, nada menos que el epicentro del pensamiento neoliberal que décadas después inspiraría su prédica política.
El dato surge del decreto N.º 2164 del 15 de septiembre de 1978, firmado por el dictador Jorge Rafael Videla, el ministro de Economía José Alfredo Martínez de Hoz y el vicealmirante Oscar Montes, entonces canciller. El documento le otorgaba a López Murphy “licencia extraordinaria con goce de haberes” durante dos años, más una asignación diaria de 25 dólares, en momentos en que el régimen imponía censura, represión y un modelo económico que destruyó la industria nacional.
La beca implicaba además el financiamiento de los viáticos de su esposa e hijos, lo que lleva el monto total a más de 18 mil dólares, una suma extraordinaria para la época. La Secretaría de Hacienda, bajo la dirección de Juan Alemann —funcionario posteriormente acusado de complicidad con delitos de lesa humanidad— justificó el beneficio alegando que los estudios eran de “interés nacional” y que estaban “directamente vinculados con las funciones que desempeñaba en el área de Hacienda”.
El dato golpea de lleno la narrativa del dirigente que se enorgullece de haber enfrentado “los privilegios del Estado” y que, en su paso por el Ministerio de Economía, ejecutó políticas de recorte brutal bajo el argumento de que “el Estado debe gastar menos de lo que recauda”. El propio López Murphy se formó, irónicamente, con dinero público en uno de los bastiones intelectuales del neoliberalismo mundial.
No fue un mérito del libre mercado ni de la iniciativa privada: fue un privilegio concedido por un régimen militar que financiaba selectivamente la formación de cuadros técnicos para sostener su modelo económico. El episodio revela una continuidad incómoda entre aquel liberalismo tecnocrático de los setenta y el que hoy se expresa en el Congreso con idéntico desprecio por lo público, aunque sostenido, paradójicamente, por el mismo Estado al que critican.
En tiempos en que miles de estudiantes y científicos ven recortadas sus becas y sus sueldos, el caso de López Murphy vuelve a poner sobre la mesa una pregunta elemental: ¿quién paga la coherencia ideológica de los que predican austeridad?
Fuentes:
1. Página/12 – “López Murphy, un liberal que estudió financiado por el Estado”. Publicado el 20 de octubre de 2025. Disponible en: https://www.pagina12.com.ar/866897-lopez-murphy-un-liberal-que-estudio-financiado-por-el-estado
2. Fuego24 – “López Murphy, un liberal que estudió financiado por el Estado”. Disponible en: https://fuego24.com/nacionales-e-internacionales/lopez-murphy-un-liberal-que-estudio-financiado-por-el-estado
3. Decreto N.º 2164/1978 – Firmado por Jorge Rafael Videla, José Alfredo Martínez de Hoz y Oscar Montes (referido en las notas citadas, disponible en el Archivo Nacional de la Administración Pública y reproducido por Página/12).
El campeón del ajuste a las universidades cobró del Estado mientras estudiaba en Chicago
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