15 de agosto de 2025 | Por Redacción Enorsai

Una alerta que el gobierno quiere tapar: $800 mil dólares bajo la lupa
Un reporte de operación sospechosa destapó la presencia de 800 mil dólares depositados en la cuenta de Zefico S.A., una empresa vinculada de forma directa a Santiago Caputo, principal asesor presidencial y arquitecto silencioso del poder libertario. La operación fue detectada por la Unidad de Información Financiera (UIF) bajo la dirección de Paul Stark, un funcionario designado a dedo por los propios Caputo y Karina Milei.
La estructura de Zefico llama la atención: solo tiene dos socios y un único empleado, que es nada menos que Caputo, incorporado tras la asunción del gobierno. El supuesto justificado fue una herencia familiar de los hermanos Costa, socios de Zefico, quienes depositaron $400 mil cada uno para “capitalizar” la firma. Sin trayectoria operativa relevante ni empleados previos, la operación se activó como “alerta” automática en el sistema bancario —y la UIF recibió el reporte.
De investigar el lavado a perseguir la filtración: la maniobra insólita de la UIF
Ante la alerta, en vez de abrir una investigación sobre la procedencia y destino del dinero (como exige la ley), el titular de la UIF, Paul Stark, desvió el foco: denunció judicialmente la filtración de la información en la fiscalía de Carlos Stornelli, investigando quién difundió el reporte interno, no el origen del dinero.
Según fuentes de la La Nación y periodistas de Radio Con Vos – La inmensa minoría, Stark buscó el acceso en la base de la UIF y confirmó que sólo él había accedido al ROS en su sistema, eximiendo a la propia UIF y apuntando la investigación a un posible “soplón” bancario externo. El trasfondo: proteger el sistema y, de paso, blindar de las miradas judiciales a Santiago Caputo.
Zefico, el agro y los negocios turbios
Zefico S.A. está atada por hilos invisibles al negocio agropecuario y la administración de patrimonios rurales de la familia Costa, pero su actividad declarada es difusa. Según trascendidos, el giro fue justificado administrativamente como herencia para compra de inmuebles rurales o inversión en propiedades familiares; sin embargo, la firma no presenta nómina real de empleados, ni registros de operaciones relevantes.
El rol de Caputo —al mismo tiempo asesor clave del presidente, con influencia real sobre inteligencia, justicia y reguladores financieros— dispara sospechas sobre posible uso de vehículos societarios para canalizar fondos opacos y garantizar “salarios” encubiertos para funcionarios de máxima confianza.
La doble vara de la Argentina: silencio oficial y normalización del escándalo
En otra era, una noticia así habría detonado escándalo nacional: fondos desconocidos depositados en una empresa sin actividad con fuerte ligazón al asesor más poderoso del país, un jefe de la SIDE en las sombras, y una UIF que protege a su propio jefe investigando al filtrador y no el posible lavado de dinero. Hoy, con medios, empresarios y jueces alineados, reina la doble vara y la impunidad mediática.
La corrupción libertaria vuelve a tensar los límites de la ética pública. Ojalá en Argentina la justicia vuelva a mirar dónde más se ensucia el poder, y no apenas quién filtra las alarmas.
Fuentes y ampliaciones recomendadas
- Radio Con vos – La inmensa minoría: columna de Esteban Rafele (15 agosto 2025)
- La Nación – Reporte de operación sospechosa y la maniobra UIF
- Página/12 – Zefico y sospechas de lavado
- Ámbito – Lavado y rol de la UIF bajo Stark
Fuente: Radio Con vos – La inmensa minoría | Columna de Esteban Rafele | Relevamiento periodístico Enorsai 2025.



















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