El gobernador bonaerense criticó con dureza al presidente por el desfinanciamiento educativo y convocó a fortalecer las bancas que defiendan la escuela pública en las elecciones de octubre.
En un acto en San Martín, junto al candidato Jorge Taiana, Axel Kicillof acusó al Gobierno nacional de paralizar la obra pública y de atacar la educación gratuita. Reclamó respaldo legislativo para frenar las políticas de Javier Milei.
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, volvió a poner en el centro del debate uno de los temas más sensibles: el ajuste contra la educación pública. Desde San Martín, donde inauguró la Escuela Secundaria N°58 acompañado por el candidato a diputado de Fuerza Patria, Jorge Taiana, lanzó un llamado explícito: “En octubre hay que llenar el Congreso de diputados que defiendan la educación pública”.
El mensaje no fue casual ni inocente. Kicillof apuntó directamente contra el presidente Javier Milei, a quien responsabilizó por el desfinanciamiento de las universidades y por el veto a la Ley de Financiamiento Universitario, una decisión que dejó al descubierto —según el mandatario provincial— el desprecio oficial hacia el sistema educativo argentino. “Ante un Gobierno que no escuchó a las urnas y vetó la ley, demostramos con hechos que siempre vamos a defender de manera inclaudicable la educación pública, gratuita y de calidad en todos sus niveles”, sostuvo con tono desafiante.
La obra inaugurada, con una inversión de $1.933 millones, beneficiará a los vecinos del barrio Libertador, que hasta ahora no contaban con oferta de nivel secundario. Ese dato concreto contrastó con las políticas de Milei, centradas en paralizar proyectos educativos y reducir el rol del Estado. Kicillof no dejó pasar la oportunidad para marcar la diferencia: “Mientras en Nación se cierran puertas, acá las abrimos para garantizar derechos”.
Taiana, por su parte, reforzó el planteo con un argumento político que pega de lleno en la Casa Rosada: “Esta escuela se construyó a pesar de todas las dificultades que implica tener un Gobierno nacional en contra de la obra pública. Aquí estamos convencidos de que la función de los gobernantes es mejorar las condiciones de vida de los argentinos”.
La disputa no es solamente discursiva. De cara a las elecciones legislativas del 26 de octubre, la definición es clara: Milei quiere un Congreso alineado con su programa de ajuste, mientras que Kicillof busca construir un bloque que resista el avance del desmantelamiento estatal. La educación se convirtió en el campo de batalla simbólico y concreto, porque cada recorte pega directamente en las aulas, en los estudiantes y en las familias trabajadoras.
La presencia del director general de Cultura y Educación, Alberto Sileoni, y del intendente Fernando Moreira terminó de dar al acto un carácter político de peso. El oficialismo bonaerense se muestra decidido a transformar cada inauguración en una respuesta al ajuste nacional, señalando que el contraste entre gestión provincial y gestión nacional no es una abstracción, sino una disputa palpable que se mide en escuelas abiertas o cerradas.
Kicillof lo dejó claro: octubre no será solo una elección de medio término, sino una pulseada decisiva para el futuro de la educación pública. Y en esa pelea, el gobernador eligió un camino frontal, sin eufemismos, marcando a Milei como el responsable directo de un ataque sistemático contra el derecho a estudiar.
Fuente:
.https://noticiasargentinas.com/politica/axel-kicillof—en-octubre-hay-que-llenar-el-congreso-de-diputados-que-defiendan-la-educacion-publica-_a68c478242d8583d1f9bb5be0
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