El modelo Milei no necesita científicos: sólo quiere obedientes y baratos
Nuria Giniger: “Nos están llevando a la destrucción del sistema científico, de la soberanía y de la democracia”
La ciencia argentina está en terapia intensiva. Con un recorte salarial de entre el 35% y el 40% desde que asumió Javier Milei, la falta total de paritarias y un modelo de país que desprecia el conocimiento, la comunidad científica se enfrenta a una de las peores crisis de su historia.
“La situación es catastrófica”, denunció Nuria Giniger, investigadora del CONICET, en diálogo con Víctor Hugo Morales por AM750. “Estamos buscando cómo llegar a fin de mes. No hay condiciones para sostener las investigaciones, ni para iniciar el próximo cuatrimestre. Este gobierno quiere destruir la ciencia, la soberanía y la democracia”.
Salarios de hambre para los que generan conocimiento
Los datos son contundentes:
- Una beca doctoral del CONICET hoy ronda los 945.000 pesos mensuales.
- Una beca Agencia I+D+i, apenas 768.000 pesos.
- Un profesor asistente con dedicación exclusiva cobra alrededor de 800.000 pesos.
Con una inflación acumulada de tres dígitos, estos montos son directamente incompatibles con la vida. Pero el problema va más allá de lo económico. “No se trata solo de números. Es el modelo de país lo que está en juego”, advirtió Giniger.
Sin paritarias, sin ciencia, sin futuro
Desde octubre de 2024 no hay paritarias para el personal universitario, y los trabajadores del CONICET, al igual que todo el sector público, están congelados salarialmente mientras los precios se disparan. Este congelamiento deliberado no es una consecuencia: es una decisión política de destrucción del sistema científico-tecnológico.
Giniger adelantó que esta semana habrá múltiples movilizaciones. El miércoles se convoca a ATE y gremios estatales frente al Ministerio que ahora lidera Federico Sturzenegger, para exigir la apertura de negociaciones salariales. El jueves, será el turno de las universidades, que ya anticiparon que no hay condiciones materiales para iniciar el próximo cuatrimestre.
Milei quiere un país sin ciencia: servil, extractivista y dependiente
“El plan de Milei no tiene lugar para investigadores ni docentes. Pretende un país eternamente primario, sin ciencia ni tecnología propia”, explicó Giniger. “No es un problema de balances o de déficit fiscal. Es ideológico. Es el sueño libertario: un país obediente, sin pensamiento crítico, sin desarrollo nacional”.
La investigadora también señaló la connivencia internacional del modelo Milei, que alinea a la Argentina con Estados Unidos e Israel, incluso en el plano militar y geopolítico, “llevándonos a un eje de guerra y genocidio mientras desarma todos los instrumentos de soberanía interna”.
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El ajuste libertario en el sistema científico no es un descuido ni una consecuencia colateral del “plan motosierra”. Es parte del plan. Sin científicos, sin universidades activas, sin investigación básica, la Argentina queda reducida a ser un gran campo de explotación para las corporaciones extranjeras. Todo lo que implique pensar, crear o producir desde el conocimiento nacional es un estorbo para el ideario de Milei y Sturzenegger.
Los efectos ya se sienten:
- Fuga de cerebros acelerada.
- Investigadores que abandonan proyectos o directamente el país.
- Laboratorios cerrados.
- Becas que no alcanzan para alquilar una habitación.
- Facultades sin insumos básicos para trabajar.
La situación es tan crítica que ni siquiera hay condiciones para iniciar el próximo cuatrimestre en muchas universidades públicas.
No es contra Milei, es en defensa del conocimiento
Las movilizaciones de esta semana no son políticas en el sentido partidario. Son la reacción desesperada de un sector clave del Estado que está siendo deliberadamente desmantelado. “Estamos hartos del maltrato”, dijo Giniger. “No vamos a dejar que destruyan lo que costó generaciones construir”.
En una Argentina que se debate entre la oscuridad del dogma libertario y la defensa de un proyecto soberano, el futuro de la ciencia no es un detalle: es el corazón del desarrollo nacional.
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